UNIDAD EN LA CIUDAD Y EN EL PAÍS PARA LUCHAR POR EL SALARIO Y LA EDUCACIÓN PÚBLICA

Mientras los empresarios y comerciantes suben los precios todos los días, el gobierno quiere ajustar nuestros salarios por debajo de la inflación. El año pasado, los precios subieron más del 28%, en tanto el gobierno sólo autorizó el recupero de 23% en la paritaria docente, fijando un miserable básico de 3.416 pesos, lo que supuso una pérdida de más del 5% del salario.
La devaluación incentivó aún más el alza de precios. La carne trepó un 30%. Los combustibles un 8%. Los elementos de la construcción parecen inalcanzables y los electrodomésticos se han convertido en bienes suntuarios. A esto se suma el tarifazo en el transporte que afecta directamente los bolsillos de los trabajadores

Por otro lado, los aceiteros obtuvieron una suma fija de 2.000 pesos, a cuenta de futuros aumentos. Y dos pagos no remunerativos de $ 4.100 cada uno ($ 8200). En total, $ 10.000 de emergencia. Además, ellos cobran un inicial de $ 9.700 pesos y se aprestan a reclamar el 35 % o más en las paritarias. Los bancarios lograron $ 1.800 a cuenta. Los choferes de larga distancia $ 1.200 y $ 70 por día de viáticos.

Mientras tanto, en la paritaria nacional docente, la Mesa compuesta por los sindicatos de la CGT Caló (UDA-AMET-SADOP-CEA) plantean llevar el salario inicial a $ 5.500, que si bien sigue siendo insuficiente significa un aumento del 61%. Lo increíble es la vergonzosa posición de la conducción de la CTERA, que serviles totales al kirchnerismo, piden $ 4.500, o sea el  25% que el gobierno nacional quiere poner de techo. Lo que no hacen ninguno de estos representantes sindicales, es denunciar que la mesa paritaria nacional es una trampa cuya única función es marcar un porcentaje de aumento salarial para que a partir de ahí se desarrollen negociaciones salariales docentes en cada distrito del país, mientras que el estado nacional sigue sin hacerse cargo del salario docente.

Si bien Ciudad de Bs As tiene fondos suficientes para afrontar una recomposición salarial acorde a la inflación porque es la ciudad con más alto PBI del país, como el resto de los gobiernos, nacional y provincial, se apresta a bajarnos el salario por debajo de la inflación. En todo el país subiste una tremenda desigualdad educativa heredada del neoliberalismo de los 90’ que hace que la diferencia entre las provincias pueda llegar a tal punto que, por ejemplo, por cada peso invertido por alumno en unas, en otras  se invierten cuatro, mientras que en salarios es de 1 a 2. La paritaria nacional y  el Congreso Nacional deben discutir que el estado nacional sea, al menos, corresponsable del financiamiento educativo, aumentando de emergencia su inversión en educación al 50% (actualmente aporta solo el 30%). De este modo podría establecerse un nomenclador salarial básico único nacional más un plus por provincia según el índice de precios provincial. Plata hay: se puede suspender el pago de la fraudulenta deuda externa que este año llevará $ 77.300 millones mientras que solo $ 60.800 serán para educación. Se pueden aumentar impuestos a los grandes monopolios extranjeros y al capital financiero.

En nuestro distrito, el Ministro de Educación sigue sin dar respuesta a los problemas generados por la inscripción on line y a la falta de vacantes –problema que dejó en evidencia la falta de construcción de escuelas y jardines-, mientras les dice  a los representantes sindicales que están considerando un aumento del 22-23%, anual y "escalonado", o sea en cuotas. Ante esta situación, en la que nuevamente se busca que la crisis económica la paguemos los trabajadores, proponemos discutir en las escuelas cómo organizarnos y qué debemos reclamar. ADEMYS sostiene que son necesarios $ 8.000 de salario inicial para el cargo testigo y $ 6.000 de básico, entre otros reclamos. Debatamos si esta cifra es correcta o hay que ajustarla. Preparémonos para intervenir activamente en esta pelea por nuestro salario y que no se repita el escenario de los últimos años, en donde sindicatos que en realidad son sellos de goma, firman aumentos insuficientes, con cifras en negro y en cuotas, mientras que la UTE dice rechazar los  acuerdos, en los hechos los deja pasar, ya que no llama a luchar para cambiarlos.

El lunes se realiza en Bs As una reunión nacional de sindicatos no oficialistas de 9 provincias: ATEN (Neuquén), ADOSAC (Santa Cruz),  ADEMYS (Caba),  SUTEF (Tierra del Fuego), Gremio Docentes Autoconvocados (Formosa) SUTE Godoy Cruz (Mendoza), AMSAFE Rosario,  AGMER Filial María Grande-Depto Paraná (Entre Ríos), SUTEBAs Quilmes, La Plata, Bahía Blanca, Marcos Paz, Escobar, Tigre, Ensenada,  Berazategui, La Matanza y minoría San Isidro. Esta reunión debería exigir a las centrales sindicales docentes un plan de acción nacional unitario para luchar por un salario básico nacional de 6.000$ de básico más un plus por IPC provincial (Índice del Precio al Consumidor) y una partida de emergencia del presupuesto nacional para solventarlo, junto con los respectivos aumentos de los presupuestos provinciales y coordinar ellas un  plan nacional de lucha votado en cada escuela del país. Nuestra propuesta es que no se puede empezar las clases si no nos dan una recomposición salarial acorde a la inflación, y nueva mesa salarial en junio.

Por eso, con la realización de reuniones y mandatos por escuela, y con la convocatoria a asambleas abiertas que reflejen estos mandatos, en Ciudad debemos organizar la pelea por nuestro salario y la defensa de la educación pública, y desde Ademys convocar a UTE y al resto de sindicatos con representación real a unificar la lucha por lograrlo. En ese sentido, proponemos concurrir masivamente a la asamblea abierta de este jueves.

Sin construcción de escuelas, sin vacantes y con salarios bajos y atrasados no podemos iniciar las clases.
ASAMBLEA ABIERTA CON MANDATOS
JUEVES 20, 18 HS.
CTA- CAPITAL INDEPENDENCIA 776
Bs As, 15-02-14